Señoras y señores, damos por inaugurada la temporada festivo-navideña de 2016!
Desde el día 22 de noviembre y hasta el día de Navidad, muchísimos pueblos y ciudades de Europa se engalanan para dar comienzo la época más entrañable del año. Los mercados navideños se ponen en funcionamiento, los árboles se llenan de luces, las ventanas de pesebres y los colores blanco y rojo están por todas partes. Y aquí se lo toman realmente en serio. Eso sí, cuando nosotros estamos con los canelones de San Esteban, con las uvas del fin de año y con los reyes magos, aquí ya están descansando.
Por eso hemos querido aprovechar y nos hemos alquilado un coche con rumbo a la región de la Alsacia, (al nordeste de Francia) para recorrerla de sud a norte, desde Mulhouse a Estrasburgo. Llegamos el viernes por la noche a Mulhouse aunque sólo nos quedamos para dormir (aunque es otra opción que visitar si tenéis tiempo).
Toda esta zona es reconocida por sus bellos pueblos, su cultura y su gastronomía (y enología). En estas fechas en la mayoría de pueblos se celebran típicos mercados navideños y son de visita obligada. ¿Quién se puede resistir a un vino caliente para templarse en las frías tardes invernales? ¿O a quién no le apetece probar una deliciosa salchicha alsaciana con su pan crujiente y su delicioso chucrut? Y como no, sus dulces y repostería que harían enloquecer a cualquier food lover (un servidor incluido).
Pues sin más dilaciones ahí van los pueblos más bonitos de la Alsacia (de sud a norte):
EGUISHEIM
Desde Mulhouse hemos tardado media hora y hemos venido prontito (sobre las 10) y nos hemos encontrado el pueblo vacío (perfecto!), todo para nosotros.
Eguisheim es realmente pequeño. Tiene forma redondeada y tiene un recorrido bastante lógico que te permite pasear por todas sus calles sin dejarte ninguna. Las típicas casas alsacianas se caracterizan por tener una planta baja de piedra y una estructura superior de madera, así como por estar pintadas con llamativos colores pastel.
COLMAR
Seguimos subiendo y a menos de 20 minutos llegamos a Colmar. Se trata de la segunda ciudad más poblada de la Alsacia después de Estrasburgo. Pudimos aparcar a unos 15 minutos a pie del centro, lo cual no está nada mal. Sobre las 12 Colmar ya estaba en plena ebullición. Es una ciudad con mucho encanto, con sus casas de colores reflejadas en las aguas del canal, las llamativas (y súper decoradas) fachadas de los edificios, sus tiendecitas de artesanías y su catedral gótica.
KAYSERSBERG
Unos 20 minutos más hacia el norte pero desviándonos al oeste llegamos a este otro pequeño y encantador pueblo. Llegamos a la hora de comer (todo calculado) y nos hicimos paso por los mercados en busca de las paradas de comida. Optamos por las salchichas alsacianas "Knack" y lo aderezamos con zumo en vez del vino caliente. El zumo de manzana caliente es otra bebida típica. Le añaden especies como la canela y a menudo también lo combinan con un toque de naranja. Está simplemente espectacular. Si las salchichas no son vuestro fuerte también tenéis croque monsieurs, baguettes gratinadas, pasta con queso "munster" y bacon, bretzels, waffles, etc... Así que tranquilos que hambre no pasaréis!
Hay que decir que lo tienen todo muy bien organizado. Kaysersberg es pequeño e imposible aparcar con tantísima gente que acude estos días, pero el pueblo tiene varios parquings cercanos (a 2 euros por toda la jornada) y un servicio de autobuses gratuito cada 15 minutos que va trayendo y llevando a la gente, lo cual es bastante cómodo y buena opción.
RIQUEWIHR
Una vez entrada la tarde y ya oscureciendo (a partir de las 6 de la tarde) hicimos nuestra última parada en Riquewihr. Está a 15 minutos en dirección norte y aunque en principio no pensábamos parar, luego valió la pena pues nos gustó bastante. Cuando se accede a la parte antigua del pueblo por un gran porticón medieval, el espíritu navideño se apodera de los visitantes. Una larga calle cuesta arriba repleta de tiendecitas, pasillos que te llevan a mercados de artesanías, olores de tentadores manjares y melodías instrumentales que resultan familiares.
ANDLAU
Dormimos en Le Hohwald que es un pueblo de 4 casas y no tiene nada, pero fue la opción más barata y cercana a Estrasburgo (a unos 40 minutos). Por la mañana a 5 minutos nos paramos en Andlau, que es un pequeño pueblo con encanto, pero sin mercadillo, así que como queríamos llegar pronto a Estrasburgo "tiramos millas".
Hay que decir que dormimos en un hospedaje que fue todo un descubrimiento pues la dueña es un personaje singular que vale la pena conocer. Para haceros una idea sólo hace falta ver cómo tiene la zona del desayuno.
Por si os interesa se llama Tilly's Bed and Breakfast.
ESTRASBURGO
Estrasburgo es la ciudad más poblada de la Alsacia y es conocida por ser donde se celebró el primer mercado navideño por allá el 1570, por lo que no es de extrañar que sea uno de los sitios más visitados de la zona. Durante este mes la ciudad acoge hasta 8 espacios dedicados mercados navideños repartidos por la ciudad...ahí es nada! Así que tenéis para dedicarle tranquilamente un día entero, con la calma.
Como veis Estrasburgo es parada obligatoria. Si lo vuestro son las compras navideñas, los productos artesanales, la gastronomía local y os encanta callejear sin prisa, aquí disfrutaréis. Es perfecto también para hacer las delicias de los más pequeños que se asombrarán con las magníficas y llamativas decoraciones. Eso sí, hay que decir que en estas fechas es muy turística y los fines de semana os la encontraréis a rebosar de visitantes, aunque al tener los espacios tan bien repartidos por la ciudad, no da sensación de agobio.
Hasta aquí nuestro reportage Alsaciano. Hay que decir que es una región que nos ha encantado y a la que seguramente volveremos para re-descurbrirla en otra época del año... talvez en primavera?
Un saludo Mundileros! :D
Mike and Charls
